He podido hacer varias hipótesis sobre ello y a medida que hablo me digo a mi mismo "estás volviendo a hacerte el listo, como siempre, detente" eso es lo que parece cuando te explico una de mis múltiples conclusiones.
Soy de mucho pensar y de preocuparme por todo mientras que tu actúas por la vida sin pensar en sus consecuencias. Por eso solemos estar en desacuerdo en bastantes cosas pero nos complementamos a nuestro modo.
Si, lo he dicho varias veces pero pienso que es bueno recordarlo.
No voy a hacerte una pregunta a la que no puedes responderme, en todo caso trataré de imaginar un sin fin de posibilidades mientras que continuo confiando en ti sin dudar un segundo a pesar de que no todo sea como una vez me dijiste. Te quiero y eso va por encima de todo aquello.
Pero hay algo que me perturba...
La verdad es que tergiversar la verdad es algo que hacemos todos, la confundimos y vamos al lado malo. Pensamos que las conversaciones que están detrás de nosotros tienen que ver con alguna ridiculez de nuestro aspecto. Como ese momento en el que escuchas un cuchicheo en el metro y buscas el reflejo del cristal para comprobar si hay algo que no debería de estar.
Personas como tu y como yo que no han tenido nunca a nadie en quien confiar en totalidad y solo han escuchado malos comentarios por ambas orejas somos propensos a sospechar incluso de alguien que ni siquiera se ha dado cuenta de nuestra existencia... Pero no es este el tema que nos concierne ¿cierto?
Tu has estado solo y yo me he sentido del mismo modo a pesar de que tenía gente junto a mi, pero no eran mas que transeúntes que, en algún momento tenían que salir de mi vida tal como entraron. Y al igual que mi persona tu tienes esa constante necesidad de sentirte importante para esa persona a la que amas ¿Me equivoco?
No te voy a culpar por ello, tuve esas mismas aficiones antaño y por eso puedo comprender algunas de tus motivaciones pero... ¿Por que? ¿Acaso pensaste en como podía repercutir en mi? Te dije que no pasaba nada y que te perdonaba, lo mantengo pero... ¿Puedes hacerte una idea de lo ridículo que me sentí al conocer la realidad?
He discutido con la nada, me he enfadado por algo que no está, he tenido miedo de lo inexistente y he hablado de mas... pero eso lo hago siempre. Si tanto necesitas provocar mis auto-destructivos celos y mi infinita posesividad ¿Es que no ha quedado claro todo lo que te quiero? Intento hacer todo lo posible para que nunca dudes de ello...
Todas estas jaquecas no han sido mas que una perdida de tiempo.
No es la primera vez que esto me ha sucedido, si retrocedemos varios pasos en este mismo blog se puede ver un enfado similar por provocar a uno de los rasgos de los que menos me siento orgulloso. Al menos tu has tenido la decencia de rectificar y no como quien lo utilizó para manipularme, menospreciarme, usarme y después tirarme como si yo no tuviera otro sentimiento en mi interior más que los celos.
Pero luego lo pienso... y tal vez yo no fuera del todo sincero contigo muchas veces.
Todos aquellos "si, estoy bien, no pasa nada... tu no le des vueltas" y mas ejemplos similares tal vez fueran mas parecido a "no, estoy fatal, todo me sale del revés... ayúdame". Pero solo son nimiedades que no tienen demasiada importancia. Si, me hacen sentir mal constantemente, me amargan y siento que voy a seguir luchando contra el mundo con mis manos y lo poco útil que hay en mi mente pero si puedo seguir aguantando tal como lo hago no tengo necesidad de molestarte con mis quejidos... ya que, si tengo una oportunidad para disponer de ti no la voy a malgastar con mis necesidades, sino para volver a tenderte mi mano por enésima vez para que tu dependas de mi.
No te preocupes, el día que caiga y ni pueda levantar la cabeza no me quedará mas remedio que pedirte ayuda para que vuelvas a poner mis pies en el suelo, como debe de ser. No le doy esa responsabilidad a nadie porque no confío en como vayan a tratar mi débil estructura, pero se que puedo dejarlo en tus manos.
A pesar de todo yo quiero seguir confiando en ti. Aunque parezca que tu sigas dudando de la realidad.
De verdad que me encantaría leerte la mente para saber por qué lo has hecho.
Pero mientras tanto... seguiré a tu lado.
