sábado, 25 de febrero de 2012

38th step

Desde que se me planteó aquella posibilidad no he dejado de darle vueltas a todo lo que se quedaría atrás. Se que es pronto para suponer, quizás me estoy comiendo la cabeza por nada... como hago prácticamente el 100% de las veces, pero una parte de mi piensa "¿Y si esta vez es la excepción?"

¿Y si es de esas delicadas decisiones de las que me podría arrepentir por siempre?

Ya lo sabes, sobretodo porque no dejo de quejarme de ello, pero detesto sentirme inútil, no soy una persona característica por estar quieto, de hecho soy bastante conocido por ese hecho, el descubrir, socializar, no parar en ningún momento, ser totalmente activo.

A pesar de mi pereza en algunas ocasiones, pero esas son bobadas que no vienen al caso.

Necesito ser alguien, tener una vida que vivir.

Nadie se imagina la amargura que suponen casi cuatro años de la misma rutina: Levantarse a las cinco, estar en el ordenador que supone mi única ventana al mundo exterior y acostarme cuando amanezca.

No quiero estar despierto cuando el mundo continúa con su camino mientras mi vida pasa y sigo detenido en el mismo paso durante mil días de mi existencia.

Odio reconocerlo pero me dan envidia las personas con un objetivo mientras que yo sigo totalmente perdido.

El tiempo pasa.

La edad avanza.

Y mis pies no tienen la oportunidad de moverse.

Inmóviles, temerosos.

Por el fracaso.

¿Se puede caer mas bajo?

Si. Si me sucede a mi, desde luego que si.

0 clouds:

Publicar un comentario